He creído, desde siempre, que la enunciación de la palabra poética infunde formas de estar del pensamiento; aleaciones, fracturas, surcos que delinean el aspecto de lo real.


Mi perspectiva, a la vez fascinada y desencantada, me ha llevado a probar expresiones y aproximaciones artísticas diversas con sesgos literarios.


La urgencia por experiencias de lo vivo y de lo único me llevaron, en algún momento, a tender lazos con la tradición del judaísmo, especializándome en la lectura y el estudio de la literatura bíblica y rabínica. La invocación de la posibilidad de toda fuerza poética se hacía realidad metafísica. Distanciarme de dicha tradición me llevó a escribir mi primer texto en prosa publicado, Auspicio: un augurio de narración oracular sobre el sentido de toda creación artística como incompletitud.


De vuelta a las vibraciones inmanentes de aquello que deseo redescubrir en lo vivo, regreso a la poesía y a lo melódico; al pensamiento que traza líneas de lo filosófico y lo poético. Todo ello en textos aún inéditos y cuyas formas de lo aventuroso.​


Actualmente termino un doctorado en Letras Modernas en la UIA, México. He publicado en revistas literarias y académicas; libros y cosas que están esparcidas en internet. Mis proyectos profesionales y literarios combinan aspectos interdisciplinares como lo filosófico y el acercamiento a otras perspectivas no exclusivas del arte.


No se terminan las andanzas por lo posible.



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